En tiempo de lluvias, 5 consejos para evitar el “aquaplanning” y reducir los accidentes de tránsito

 El fenómeno conocido como “Aquaplaning” sucede cuando una capa delgada de agua impide el normal contacto y adherencia de la llanta contra el asfalto, es causa de una gran cantidad de accidentes automovilísticos.

En un país como Colombia donde varias zonas del país tienen lluvias frecuentes, es importante identificar ciertos factores de riesgo vial que, por más habituales o recurrentes que sean para muchos conductores, deben contar con el conocimiento para estar preparados y así reducir uno de las principales causas de incidentes en las vías. 

Una de esas situaciones de riesgo, precisamente, tiene que ver con el fenómeno conocido como “aquaplaning”: la pérdida gradual de contacto entre la llanta y la superficie del asfalto, provocada por la entrada de una delgada capa de agua, entre ambos objetos. 

El aquaplaning (o hidroplaneo como también se le conoce) sucede con frecuencia y es causante de una gran cantidad de accidentes automovilísticos. Según un estudio elaborado por la Cruz Roja en junio del año 2017, en temporadas de lluvias los accidentes viales aumentan alrededor de un 30%, principalmente por la pérdida de control de los vehículos a causa de las altas velocidades.

Por esta razón expertos de Baterías Mac comparten prácticas recomendaciones para tener en cuenta: 

1. Calibrar bien las llantas:

Unas llantas bien calibradas, además de permitir una conducción más eficiente, garantizan la seguridad del conductor pues previenen el aquaplaning. En cambio, si la presión de las llantas es un 30% inferior a la presión recomendada, existe un riesgo mucho mayor de que el auto patine, sobre todo en superficies húmedas y encharcadas.  

Por esta razón, las llantas deben ser infladas a la presión indicada por el fabricante. Igualmente, es importante practicarles un mantenimiento continuo para detectar a tiempo posibles daños y/o inconsistencias, que puedan derivar en un grave accidente automovilístico. 

2. Las llantas nuevas, siempre atrás: 

Cuando las llantas son reemplazadas, las nuevas deben ser instaladas en la parte posterior del auto y las traseras colocadas en la zona de adelante. Esto se debe a que las llantas nuevas ubicadas en el eje trasero ayudan al conductor a tener un mayor control sobre las superficies mojadas, gracias a que cuentan con una banda de rodamiento más profunda, que las hace más resistentes a los deslizamientos en agua. 

Así mismo, es recomendable intercambiar (rotar) las llantas del carro cada 7.000 KM para asegurarse de que duren lo máximo posible, pues estas tienden a desgastarse de forma desigual. 

3. Nunca frenar: 

Seguramente, frenar en seco sería la primera reacción que un conductor tendría al experimentar por primera vez un aquaplaning. Lo cual no quiere decir, sin embargo, que sea la decisión más 

esto lo que menos se debe hacer en esta clase de situaciones, ya que al pisar el freno, las llantas se bloquearán al rozar el suelo, causando la pérdida de control del vehículo de forma mucho más rápida 

Una buena recomendación para este escenario es soltar el acelerador para que la velocidad vaya disminuyendo poco a poco, de tal forma que el conductor logre recuperar la plena maniobrabilidad del auto en el menor tiempo posible, evitando un grave accidente. 

4. Moderar la velocidad: 

En días lluviosos, lo mejor es controlar el estrés habitual y manejar a pocas velocidades, conduciendo de forma muy suave, y evitando frenazos y cambios de dirección bruscos para que no se dé el aquaplaning. 

5. Batería de carro en buenas condiciones:

Contar con una batería de carro que esté cargada y en óptimas condiciones para que cada una de las funciones eléctricas del vehículo estén en pleno funcionamiento, así las luces, los testigos y demás elementos estarán a disposición para reaccionar ante esta eventualidad.